miércoles, 13 de junio de 2007

CCOO advierte que se desconoce la causa del origen del 17% de los incendios forestales


-En el último decenio ha ardido más del 15% de la superficie forestal de Galicia
-Piden que se dote a las fiscalías de más medios materiales y personales
Durante el año 2006 se registraron en España un total de 16.355 incendios forestales, que afectaron a una superficie de 148.826 hectáreas, unas cifras que ponen de manifiesto que pese a que ambas cifras son menores que las del año anterior, "aún queda mucho por hacer", según Joaquín Nieto, secretario confederal de Medio Ambiente y salud laboral de CCOO. Entre otros aspectos en la investigación de las causas de los fuegos, que sólo se conoce en el 17% de los siniestros de los últimos 12 meses. Sin embargo, los datos que aportan los agentes forestales y las diferentes fiscalías permiten apuntar que la intencionalidad puede alcanzar el 84% de los casos en regiones como Galicia.

Las regiones con un mayor porcentaje de incendios de origen desconocido son Madrid, Asturias, País Vasco, Canarias y Navarra, mientras que las que registran una mayor tasa de incendios de origen intencionado son Galicia (el 84,69%), Cantabria (68%), Castilla y León (46%), Canarias (41%) y Extremadura (40%).

"No lograremos bajar drásticamente el número de incendios y la superficie quemada sólo con mejoras continuas. Hacen falta dos grandes cambios estructurales: el primero, en los ecosistemas, y el segundo, una profunda renovación en las prácticas agrícolas y ganaderas", señaló Nieto.

En el primero de los casos, desde CCOO denuncian que es prioritario acabar con las grandes masas forestales de pinos o eucaliptos de la misma especie, que hacen que los fuegos se propaguen y sean prácticamente incontrolables puesto que no hay zonas de corte.

Sobre las prácticas agrícolas, el informe elaborado por Comisiones Obreras denuncia que la mayor parte de los incendios no se producen en el área mediterránea, sino en el noroeste de España, y la mayoría de ellos son incendios intencionados.

Pero el principal punto para conseguir ganar la batalla al fuego que cada verano arrasa España es en la prevención y extinción. "Hay que mejorar las condiciones de trabajo de las 300.000 personas que en España se dedican a estas tareas, porque es un colectivo muy maltratado, con contratos inestables y una siniestralidad laboral inaceptablemente alta", denunció Nieto. Desde el año 1979, en España han fallecido 241 personas en incendios forestales, de los que 175 eran profesionales de la extinción, voluntarios o fuerzas del orden y del ejército.

Desde CCOO destacan el fundamental papel preventivo que están jugando las diferentes fiscalías de Medio Ambiente, que "aunque su eficacia a la hora de meter a gente en la cárcel por provocar incendios es bastante escasa, sí juegan un importante papel disuasorio".

CCOO ha pedido que se dote a las fiscalías y a los cuerpos policiales que investigan el origen de los incendios de suficientes medios y personal, y que se incremente el número de trabajadores dedicados a la prevención y extinción de incendios, así como su formación. "Es inadmisible lo que está ocurriendo en regiones como Castilla y León, Castilla-La Mancha y Extremadura, donde son empresas privadas las que se dedican a investigar el origen del fuego", denunciaron.

Desde el sindicato valoran positivamente el esfuerzo normativo hecho por el Gobierno, que en los últimos meses ha aprobado la Ley de Montes y que a través del Ministerio de Medio Ambiente -que en realidad no tiene competencias en materia de lucha contra incendios, que depende de las Comunidades Autónomas- se estén realizando fuertes inversiones en materia de prevención y coordinación. "Son medidas que eran muy necesarias", sostienen desde CCOO.

El informe recoge que el año pasado se registraron 16.355 incendios forestales, un 35,8% menos que en 2005 y un 21,7% menos que la media del decenio 1995-2006. En cuanto a superficie quemada, el año pasado ardieron 148.826 hectáreas, un 21,2% menos que en 2005 y un 20,4% más que en el decenio. Galicia fue la comunidad autónoma que más creció el año pasado en superficie quemada, con un 61% más que en 2005.

En el último decenio ha ardido más del 15% de la superficie forestal de Galicia, el 14,3% de Asturias, el 11% de Cantabria y el siete por ciento de Castilla y León, según los datos de CCOO. La tendencia a la baja en el número de incendios parece que se mantiene en los primeros meses de 2007, en los que se han registrado 2.232 conatos (menos de una hectárea quemada) e incendios forestales, mientras que en el mismo periodo de 2006 hubo 3.345, aunque desde el sindicato piden que no se baje la guardia. "Este año puede ser mejor que el pasado, pero también puede ser mucho peor", advirtió.

jueves, 31 de mayo de 2007

EL CONCURSO "FUEGO DE PALABRAS" YA TIENE GANADORA

El concurso "Fuego de palabras" ya tiene ganadora. Se trata de la gallega Mar Eira, con su poema "Cenizas". El premio, finalmente, consistió en una guía de los bosques de Asturias.

A continuación os mostramos el poema galardonado y una fotografía del momento en que un miembro del equipo de "Infoincendios" entrega el premio a la ganadora.


CENIZAS

Cuando solo quedan
las cenizas,
el
silencio
es
una masa informe que inunda con su ruido triste y desolado
el espacio de esqueletos
grises y carbonizados,
de tierra negra y desamparada,
desnuda
de verde y vida.
El viento
irrumpe rugiente entre las ruinas, libre
de obstáculos,
arrastrando consigo las pavesas
que forman la nueva atmósfera del bosque.
El sol quema
la tierra herida
y la lluvia
ya no es agua purificadora,
es inundación,
es diluvio
sin arca salvadora.
Ya no hay luz,
ya no hay aire,
solo
el resultado de un infierno,
más de un millón de cadáveres
consumidos por el fuego.


Entrega del premio



PROCESOS QUE INTERVIENEN EN LA EXTINCIÓN DE UN INCENDIO FORESTAL

DETECCIÓN DEL INCENDIO
La rapidez en la detección de un incendio forestal supone, en la mayoría de las ocasiones, la diferencia entre un conato y un incendio de elevadas dimensiones.

ATAQUE AL INCENDIO
La extinción de incendios forestales se puede realizar actuando directamente sobre las llamas (ATAQUE DIRECTO), o bien adecuando zonas más o menos alejadas del frente del fuego, de manera que cuando las llamas lleguen a estas zonas disminuya su virulencia hasta su extinción (ATAQUE INDIRECTO).


ATAQUE DIRECTO

Ataque directo con medios terrestres

Es el realizado por aquellos medios que se desplazan utilizando las vías de acceso a los montes, tales como carreteras o caminos, siendo muy frecuente el desplazamiento monte a través con los vehículos de extinción y a pie en el caso de las cuadrillas de tierra, dado que en no pocas ocasiones los incendios se desarrollan sobre zonas de monte inaccesibles para circulación rodada.

Cuadrillas de tierra
Compuestas por una dotación de 7 operarios, de los cuales uno es el Capataz de la cuadrilla.
Poseen un vehículo todo terreno con capacidad para todo el equipo humano y para las herramientas utilizadas en las labores de extinción de incendios.

Autobombas
Son camiones de doble tracción con chasis adaptado para transportar un depósito de agua con capacidad variable entre 1.500 y 3.000 litros de agua y un sistema de bomba impulsora que expulsa el agua a presión.

Maquinaria pesada
Se utilizan tractores de orugas (bulldozer) con potencia entre 180 y 220 CV.

Ataque directo con medios aéreos

El ataque directo a través de medios aéreos se basa en arrojar agua (con o sin
retardantes) al frente de llamas. Además en el caso de helicópteros de transporte de cuadrillas,también aportan a la extinción medios humanos en actuación desde tierra.

ATAQUE INDIRECTO

El ataque indirecto se basa en sofocar el incendio sin intervenir directamente sobre sus llamas.

Ataque indirecto con medios terrestres

El ataque indirecto mediante la creación de líneas libres de vegetación, se realiza
desde tierra utilizando cuadrillas de extinción (tanto terrestres como helitransportadas) en labores de desbroce y descuaje de vegetación hasta llegar al suelo mineral, de forma que el incendio al llegar a ella se detenga por falta de combustible.

Contrafuego

Basa su efectividad en la utilización de fuego para acabar con el incendio.
El contrafuego es un fuego controlado y dirigido. Es controlado pues sus puntos de inicio están perfectamente calculados y situados en puntos donde la virulencia del fuego creado sea baja y permita su manejo. Es dirigido, pues se obliga a que la dirección de avance sea contra el incendio que se desea extinguir, circunstancia que facilita la propia fuerza de succión del frente de llamas del propio incendio.

Liquidación y remate del incendio

Tan importante como la sofocación de las llamas es impedir que éstas vuelvan a reproducirse. Las labores de liquidación y remate de un incendio se llevan a cabo con medios terrestres, tanto cuadrillas, como maquinaria pesada y se basan en la creación de una línea libre de vegetación y descubierta hasta el suelo mineral, perimetrando la totalidad del incendio, de manera que quede confinado dentro de la línea o faja creada.

viernes, 25 de mayo de 2007

LA SOLUCIÓN ESTÁ EN TUS MANOS

Recordareis que hace algunas semanas os comentábamos que “la cosa está que arde”, y muchos os preguntaríais qué era lo que queríamos decir.

Pues bien, si tuvisteis la suerte de asistir este miércoles día 23 a la clase de Zoología de 2º de Ciencias Ambientales de la ULE, o a la de Modelos Matemáticos y Simulación de 3º, es probable que ya hayáis salido de dudas.

Para todos los demás aquí os mostramos lo que sucedió:

El grupo de educación ambiental OLUME, se introdujo por sorpresa en estas clases y llevó a cabo una breve representación en la que el fuego iba mostrando sus consecuencias sobre la naturaleza.

Al finalizar la misma, se repartieron unos trípticos a los asistentes en los que se explicaban entre otros contenidos, las funciones del bosque, las causas y usos del fuego, y los posibles efectos de la interacción entre los dos elementos. Así mismo se exponen una serie de recomendaciones, que nos dicen que aunque la cosa esta que arde, la solución está en nuestras manos.



A continuación os mostramos un par de fotografías de la actuación de OLUME :

RECOMENDACIONES EN CASO DE INCENDIO FORESTAL

Si estás en el campo y se produce un incendio, saber actuar puede salvarte la vida. Por ello, te proponemos las siguientes recomendaciones:

- Mantén la calma.
- Avisa al 112.
- Colabora con los profesionales de vigilancia y prevención de incendios forestales, y respeta siempre sus indicaciones.
- Quédate siempre de espaldas al viento.


Además, te proponemos una serie de recomendaciones para que actúes en situaciones concretas:

Si estás en el monte

Si el fuego es pequeño:

Intenta apagarlo usando agua, ramas o tierra sobre la base de las llamas. Ten prevista una salida a contraviento en caso de emergencia. Tras sofocarlo, tapa las brasas y limpia de ramas sus alrededores.


Si el fuego es grande:

-Aléjate del fuego en dirección opuesta al humo.
-Respira por la nariz cubriéndote con un trapo mojado.
-No busques refugio en cuevas, bordas o casetas agrícolas, vaguadas profundas, cotas altas del terreno o en el sentido del viento.
-Recuerda que el fuego sube ladera arriba como en una chimenea y siempre más rápido de lo que a primera vista pueda parecer. Si avanza por una ladera en la que te encuentras, aléjate caminando por los flancos, sin correr, pisando firme y seguro, y siempre cuesta abajo o en dirección perpendicular al avance del fuego.
-Si el fuego te acorrala, intenta huir por los flancos, buscando una zona desprovista de vegetación.
-No utilices vehículos si estás rodeado de fuego.
-No intentes cruzar las llamas sin saber lo que hay detrás: puedes quedar atrapado. Si no hay otra salida, mójate la ropa, protégete la cara y cruza donde el frente sea estrecho o de poca intensidad.
-Si el fuego te alcanza, sitúate en arroyos o en zonas ya quemadas echado sobre el suelo detrás de alguna roca o cubierto de tierra, próximo al suelo porque es donde el aire será más puro.
-Si se prende la ropa, no corras. Échate a rodar sobre el suelo o cúbrete con una manta: el fuego se extinguirá por falta de aire.
-Si actúa la aviación o los bomberos, protégete del impacto del agua.


Si estás en una casa próxima a un incendio:


-Cierra puertas, ventanas, persianas y otras posibles entradas de aire.
-Si el fuego llega a tu casa, permanece en el interior: la casa es más segura.
-No bloquees las vías de acceso de los vehículos de extinción.


Si colaboras en la extinción de un incendio:

-Atiende siempre a las indicaciones del personal de bomberos, protección civil, guardia civil y demás agentes implicados.
-Trabaja en equipo, y evita quedarte solo o incomunicado.
-Obedece siempre la orden de retirada dada por el jefe de la extinción y también aquellas otras indicaciones formuladas por los demás agentes implicados.

lunes, 21 de mayo de 2007

EFECTOS DE LOS INCENDIOS FORESTALES (III)

EFECTOS DEL FUEGO SOBRE LA FAUNA

Los efectos del fuego sobre la fauna se clasifican en dos tipos:

Efectos directos: son los que ocurren sobre los animales
Efectos indirectos: son los que ocurren sobre el hábitat.

Los efectos directos son:

Disminución de la población por muerte. La mortalidad depende en primer lugar de la época, siendo más peligrosos los incendios que ocurren en primavera ya que la mayor parte de las especies tienen crías o huevos depositados. En segundo lugar depende de la superficie, si son incendios que afectan a una gran superficie los animales, exceptuando las aves, no tienen capacidad de movimiento para escapar al incendio. En tercer lugar los efectos sobre la mortalidad dependen de la intensidad del incendio, el calor emitido a grandes distancias produce la muerte de los animales antes de que lleguen las llamas. Por último también influyen los grupos taxonómicos; en los invertebrados la mortalidad es elevada y las aves son el grupo menos afectado.

Aumento del tamaño poblacional. Este aumento de la población es debido a la atracción de las especies por el humo o madera quemada que les sirve de alimento, como lugar de puesta o para desparasitarse (Ej. Las moscas del humo, liebre americana… etc.)

Desplazamientos y migraciones. Exceptuando las especies territoriales como aves rapaces que se quedan en el territorio aunque esté quemado, el resto se desplaza temporalmente a zonas no quemadas. Debido a estos desplazamientos, los efectos directos la fauna son menos negativos que sobre suelo o vegetación.

Los efectos indirectos son:

Cambios en la estructura del hábitat. Desaparece la estructura vertical y por tanto disminuye el número de nichos tróficos disminuyendo la riqueza de especies. Respecto a la estructura horizontal se crean paisajes de tipo mosaico y esto produce un incremento en el número de especies, es decir, el efecto producido es positivo (esto no es aplicable si los incendios afectan a una gran superficie).

Cambios tróficos. Los organismos insectívoros son los más perjudicados ya que en un incendio los invertebrados son el grupo taxonómico más afectado. Después de un incendio se produce un incremento de frugívoros y, durante los primeros años, también de herbívoros.

Grupos taxonómicos

Invertebrados: los efectos sobre los invertebrados dependen del tipo de incendio, de la vegetación afectada y de la zona de suelo donde habiten. Después de un incendio, se observa una disminución significativa de las poblaciones de insectos.

Anfibios y reptiles: no se observan efectos significativos debido a su capacidad para refugiarse. A pesar de esto se produce una disminución poblacional debido a la falta de alimentos.
Peces: los incendios producen efectos indirectos sobre los peces ya que aumenta la cantidad de depósitos en el agua y los retardantes empleados en la extinción de incendios llegan a los ríos produciendo la contaminación de las aguas.

Aves: a corto plazo (los dos primeros años) disminuye la riqueza de especies, posteriormente se incrementa al recuperarse la vegetación. Se mantienen las especies de amplio espectro trófico.

Micromamíferos: dependen del tipo de alimentación y del hábitat; las especies omnívoras no se ven afectadas ya que cambian su dieta en función de lo disponible. Después de un incendio y con el desarrollo de la vegetación herbácea, aparecen especies que consumen este tipo de vegetación pero desaparecen cuando crecen las especies leñosas. Los micromamíferos insectívoros si se ven afectados debido a la disminución de insectos.

Grandes herbívoros: dependen de la estructura resultante después del incendio, si se produce parcheado se generan efectos positivos porque utilizan las zonas quemadas en las que aparecen herbáceas como alimento y las no quemadas como zonas de reposo.


Efectos de la gestión forestal del fuego

Retirada de árboles muertos: es la primera medida que se toma tanto por los aspectos económicos como por la aparición de plagas. Para disminuir los efectos negativos deben dejarse pequeñas parcelas sin talar y corredores de enlace entre sectores no quemados.
La retirada de árboles muertos afecta sobre todo a aves territoriales.

Aparición de pistas forestales: en la extinción de incendios se abren pistas o áreas que permiten un mayor acceso aumentando la perturbación de las zonas quemadas.

Caza: después de un incendio, los animales están en una situación de estrés. Debido a esto, si se produce una presión cinegética fuerte, no se produce la regeneración faunística. Se han adoptado medidas legales para permitir la regeneración de la fauna, entre ellas, la prohibición de cazar durante los dos años siguientes a un incendio y en zonas pequeñas (<25 has) próximas a las zonas quemadas (porque son el refugio de numerosas especies). También se ofrecen subvenciones para hacer repoblaciones faunísticas.

martes, 15 de mayo de 2007

EFECTOS DE LOS INCENDIOS FORESTALES (II)

EFECTOS SOBRE LA VEGETACIÓN

Los efectos inmediatos del fuego sobre la vegetación son la pérdida de biomasa debida a su combustión total o parcial, así como la muerte de los individuos. Estos efectos dependen de los siguientes factores:

- Tipo de fuego.
- Frecuencia o intensidad con la que ocurren los incendios.
- Época del año en la que ocurre el incendio (la recuperación de las plantas es mejor si el incendio se produce en primavera que si lo hace en la época estival)
- Tipo de vegetación.

La combustión de la biomasa está determinada por:

- Temperatura que se alcance durante el incendio en las zonas que puedan afectar a la vegetación.
- Tiempo que dura esa temperatura.
- Oxigenación del fuego, la cual a su vez estará condicionada por la caracterización estructural de las plantas y las turbulencias del viento durante el incendio.

Por su parte, la mortalidad de los individuos se produce principalmente por la destrucción de los tejidos meristemáticos del vegetal. Dicho proceso destructivo vendrá determinado por la intensidad y duración del fuego. Para que se produzca la destrucción de los tejidos meristemáticos es necesario que se alcance la denominada “temperatura letal”. La temperatura letal es la temperatura que si se alcanza en el interior de las células vivas de los tejidos esenciales de la planta provoca su muerte instantánea.

La resistencia de la planta depende del diámetro del tronco y el espesor de la corteza. Estos dos parámetros aumentan con la edad del árbol, por lo que los individuos jóvenes presentan una menor resistencia que los adultos.

En líneas generales, los principales efectos negativos de un incendio sobre la vegetación son:

- Pérdida de nutrientes en el suelo.
- Modificación de los horizontes orgánicos.
- Mortalidad de las plantas por destrucción de los tejidos meristemáticos y por falta de humedad en el suelo después del incendio.

No obstante no todas las especies vegetales se comportan de igual forma ante un incendio:

Pinos: Son muy inflamables pero a la vez, son los más resistentes.Un pino adulto presenta mucha resistencia a los efectos inmediatos del fuego pero presenta un mayor riesgo de sufrir incendios debido a la gran inflamabilidad de sus hojas aciculares y a la alta producción de restos combustibles e inflamabilidad de la resina.

Pinus halepensis y Pinus pinaster son los más adaptados al fuego.

Eucaliptos: Son muy resistentes al fuego debido a su gruesa corteza además tienen una gran capacidad de rebrote, sin embargo presentan una elevada problemática debido a la modificación del extracto herbáceo y a la gran cantidad de restos que generan.

Castaños: Son muy poco resistentes ya que presentan unas hojas muy vulnerables y una corteza poco espesa. Además son muy susceptibles al ataque de los insectos tras ser afectados por el fuego.

Robles: Resisten bien los incendios ya que están adaptados a ellos, tienen una gran capacidad de rebrote.

Alcornoques: Su gruesa corteza les otorga una gran resistencia frente al fuego, pero si el incendio ocurre tras la saca del corcho, el árbol muere inevitablemente, ya que no tiene protección.

Hayas: Son muy poco resistentes al fuego debido a que presentan una corteza muy fina, hojas vulnerables y poca capacidad de germinación.

Mecanismos de regeneración vegetal

A parte de los mecanismos de resistencia que pueden presentar las plantas frente al fuego, también podemos encontrar mecanismos de regeneración que permiten la recuperación del estrato vegetal después de un incendio. Destacan:

Capacidad de rebrote:

El mecanismo más extendido, consiste en una regeneración de tejidos vegetales a partir de las yemas o de las raíces.

-Rebrote epicórmico: rebrote de las yemas situadas en el tronco o las ramas de los árboles. Por ejemplo, ocurre en Quercus suber y Pinus canariensis.
-Rebrote de cepa o lignotubérculo: a partir de un órgano especializado distinto del tronco o la raíz, situado entre ambos. Lo presentan Erica australis y Arbutus unedo.
-Rebrote de cuello: gracias a yemas situadas en el cuello de la raíz, aunque sin estar enterradas. Aparece en Cytisus scoparius y Quercus pyrenaica.
-Rebrote por chupones: a partir de raíces secundarias horizontales, desde yemas enterradas en el suelo. Como ocurre en Quercus coccifera o en Pteridium aquilinum.

La efectividad de estos mecanismos se ve condicionada por la edad y tamaño de la vegetación y por la intensidad y características del incendio, así como por las condiciones ambientales reinantes después de este.

Capacidad de germinación:

El fuego puede tener efectos beneficiosos o perjudiciales sobre la germinación de las semillas.

Por un lado favorece la ruptura de la cubierta externa de las semillas de “testa dura”. Además elimina a muchas especies competidoras. De esto modo ciertas especies están adaptadas en cierta medida al fuego, favoreciendo su germinación las temperaturas moderadamente altas generadas en el interior del suelo como consecuencia de un incendio.

Por otro lado, características del incendio como intensidad, época en la que se produce, etc., pueden ser causantes de la destrucción de los bancos de semillas.
Estos bancos pueden ser aéreos o edáficos, pudiendo estos últimos clasificarse como permanentes o como transitorios.

En muchos casos las semillas requerirán la existencia de agua en el medio para que se vea favorecida su germinación tras el incendio.

Capacidad de floración y fructificación:

La liberación de etileno al quemarse la madera, favorece los procesos de floración, sobre todo en monocotiledóneas. Un ejemplo es la especie Asphodelus albus.

sábado, 5 de mayo de 2007

EFECTOS DE LOS INCENDIOS FORESTALES (I)

Después de realizar una primera aproximación general a los incendios forestales y de informaros sobre algunos temas relacionados, pasamos a exponeros los principales efectos de los incendios forestales sobre el medio ambiente. Aunque todos conocemos muchas consecuencias negativas de los incendios forestales, quizás algunas de las que os vamos a mostrar se os hayan pasado por alto.

EFECTOS SOBRE LA ATMÓSFERA Y LAS CONDICIONES CLIMÁTICAS

El primer impacto de un incendio forestal sobre la atmósfera se produce desde el momento mismo en que la vegetación comienza a arder, liberando al medio los productos de su combustión. Algunos de estos productos de combustión son contaminantes atmosféricos, tales como el CO, SO2, N02… y partículas de diferentes tamaños. También son emitidos gases causantes de efecto invernadero, como vapor de agua, C02 y CH4.

Por otro lado la eliminación de la cubierta vegetal causada por un incendio forestal provoca importantes alteraciones microclimáticas en la zona afectada.

La eliminación de la vegetación hace que la radiación solar que llegue al suelo sea del 100 %, mientras que cuando existe una cubierta vegetal densa solo llega entre el 1 y el 2 %. Esto provocará un mayor calentamiento del suelo que hará descender su humedad relativa, así como la del aire. Además se incrementarán las oscilaciones térmicas entre el día y la noche.

El viento es frenado por la cubierta vegetal. Al desparecer esta, la acción del viento provocará la evaporación del agua de los primeros centímetros del suelo y un descenso de la humedad relativa del aire. En definitiva, el sistema evolucionará hacia unas condiciones xéricas (de baja humedad).

Además, durante un incendio se emiten a la atmósfera numerosas partículas microscópicas, que pueden actuar como núcleos de condensación que provoquen un incremento puntual de las precipitaciones.

Por otro lado existe una retroalimentación entre los incendios forestales y el cambio climático global. Como se ha señalado anteriormente, los incendios forestales provocan la emisión de gases de efecto invernadero. El efecto invernadero es el causante del cambio climático global, que conlleva un aumento de las temperaturas en verano, del número de días con temperaturas extremas y de las tormentas con descarga eléctrica, así como un descenso de las precipitaciones en verano. Todo esto provocará un incremento de la frecuencia, severidad e intensidad de los incendios forestales.

También hay que señalar que los efectos del fuego sobre el suelo, que se desarrollarán en el apartado siguiente, provocan alteraciones hidrológicas que pueden repercutir en las condiciones climáticas.


EFECTOS SOBRE EL SUELO

El suelo es uno de los elementos más frágiles de la naturaleza. Cualquier perturbación provocará en él una alteración de carácter poco reversible e incluso irreversible.

Los efectos de los incendios forestales sobre el suelo son de muy diverso tipo, dependiendo de la estructura que presente, el tipo de vegetación que sustente, la humedad, etc.

En general esta alteración provocará:

- Degradación biológica: eliminación de materia orgánica y de microorganismos.
- Degradación química: cambios en el ciclo natural de los elementos.
- Degradación física: modificación de la estructura original del suelo.

Además todos estos fenómenos se encuentran interrelacionados.

Dichos cambios pueden darse a corto o a largo plazo:

-A corto plazo (en el periodo comprendido desde que se produce el incendio hasta la instalación de nueva vegetación):

Se modificarán las proporciones de nutrientes.

Los microorganismos del suelo, indispensables para el reciclado de nutrientes, también se ven afectados por los incendios forestales. Según los tipos de microorganismos y la profundidad a la que hayan podido resguardarse se verán afectados en distinta medida. Así los hongos se verán más perjudicados que las bacterias, por presentar estas una mayor resistencia a las condiciones post-incendio.

La aparición de la vegetación va a ser primordial en la recuperación del suelo, pues así podrá completarse el ciclo del nitrógeno, favoreciendo el proceso de sucesión ecológica.

Otro factor a analizar es el de las precipitaciones. El suelo, al no disponer de la cubierta vegetal protectora y haber sufrido una importante desestructuración, sufrirá tras el incendio importantes procesos de erosión y pérdida de materiales.

-A medio y largo plazo:

Los incendios provocarán en el suelo, a medio y largo plazo, modificaciones en el ciclo biogeoquímico de los elementos. Sobre todo en el del carbono, cuya entrada principal en el ciclo depende en gran medida de la vegetación.

Por otro lado, los procesos erosivos también se prolongarán en el tiempo.

domingo, 29 de abril de 2007

«El 95 por ciento de los incendios forestales son causados por el hombre»

Así de claro se mostraba, en una conferencia celebrada en Gijón el pasado viernes, Domingos Xabier Viegas, coordinador del Centro de Estudios sobre Incendios Forestales de Portugal y uno de los mayores expertos en Europa sobre prevención y control de incendios forestales.

Esta cifra, que ya os indicábamos en la introducción sobre las causas de los incendios forestales, debe, sin duda, invitarnos a la reflexión.

A continuación os mostramos el enlace de la noticia:

http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pNumEjemplar=1621&pIdSeccion=46&pIdNoticia=515637&rand=1177838452225

viernes, 27 de abril de 2007

Fragmento del poema "Por tierras de España"; (extraído de la obra "Campos de Castilla", de Antonio Machado)

Por tierras de España

El hombre de estos campos que incendia los pinares
y su despojo aguarda como botín de guerra,
antaño hubo raído los negros encinares,
talado los robustos robledos de la sierra.

Hoy ve sus pobres hijos huyendo de sus lares;
la tempestad llevarse los limos de la tierra
por los sagrados ríos hacia los anchos mares;
y en páramos malditos trabaja, sufre y yerra, [...]

jueves, 26 de abril de 2007

BASES DEL CONCURSO LITERARIO: FUEGO DE PALABRAS

BASES DEL CONCURSO LITERARIO: FUEGO DE PALABRAS


1) Podrán participar todos aquellos interesados en la temática de los incendios forestales.

2) Los escritos se enviarán a la dirección fuegoforestal@hotmail.com, como archivo adjunto al mensaje, en el cual se hará constar: Pseudónimo, Título de la obra, Nombre y Apellidos, DNI, Dirección y teléfono de contacto. La fecha máxima de entrega será el 20 de Mayo.

3) Todos aquellos escritos que nos lleguen y participen en el concurso serán expuestos en el blog www.infoincendios.blogspot.com, después de que se haga público el fallo del jurado.

4) Las obras tendrán un máximo de 500 palabras y un mínimo de 100. El tamaño de letra será de 12, con un interlineado de 1,5. El tipo de letra será elegido por el propio autor.

5) El género y estilo literario serán libres. El tema del texto deberá estar relacionado con los incendios forestales.

6) Las obras serán inéditas y en castellano.

7) El fallo del jurado se realizará el 22 de Mayo y será inapelable.

8) El premio de la obra ganadora será un libro de temática ambiental

Toda obra que no cumpla los requisitos quedará automáticamente fuera del concurso.
Los autores se responsabilizan de que no existan derechos de terceros en las obras presentadas.

CAMPAÑA PUBLICITARIA DEL BLOG

Infoincendios ya tiene sus propios carteles publicitarios. Pronto los verás por el Campus de la ULE.







LA COSA ESTÁ QUE ARDE

Si estudias en la Facultad de Ciencias Biológicas y Ambientales de la Universidad de León, estate atent@, porque en las próximas semanas sabrás, por qué la cosa está que arde...



Firmado: Grupo de Educación Ambiental OLUME.

IV CONFERENCIA INTERNACIONAL SOBRE INCENDIOS FORESTALES

Al final de la década de los años ochenta, se iniciaron una serie de Conferencias que tenían como finalidad reunir a técnicos y expertos en la defensa contra incendios forestales y propiciar el encuentro con las autoridades responsables de esta política en cada país, procurando mejorar el control del fuego y reducir los daños producidos a nivel estatal, regional y global.

En la Cumbre Internacional sobre Incendios Forestales, celebrada en Sydney, el 8 de octubre del año 2003, los representantes de España, realizaron la propuesta de celebración de la 4ª Conferencia Internacional sobre Incendios Forestales en España, propuesta que fue aprobada por unanimidad.





Esta cuarta convocatoria de la Conferencia ha sido presentada en la 17ª Sesión del Comité Forestal de la FAO, en Roma, el 15 de marzo de 2005 y en la 5ª Sesión del Foro de Bosques de Naciones Unidas, en Nueva York, el 18 de mayo de 2005.


Los días 8 y 9 de mayo de 2006, ha tenido lugar en Madrid la reunión del International Liaison Committee (Comité Internacional de Enlace, ILC), para concretar los aspectos derivados de la organización y puesta en marcha definitiva de la convocatoria de la Conferencia.

http://www.wildfire07.es

La Junta destina 740.000 euros para prevenir incendios

La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León licita la contratación de tratamientos selvícolas preventivos de incendios en la comarca de Aguilar de Campoo, sobre una superficie de 383 hectáreas en los términos municipales de Pomar de Valdivia, San Cebrián de Mudá, Barruelo de Santullán, Mudá y la propia villa por un importe de 740.000 euros.

Esas actuaciones tienen como finalidad la ejecución de trabajos selvícolas en masas artificiales de pinar y naturales de quercíneas, en varios montes de la Montaña.

Así, se podrá disponer de una cuadrilla para la colaboración en tareas de extinción de incendios forestales, a la vez que se van acondicionando diversos montes, con el objeto de contener la erosión de terrenos ubicados en laderas de fuerte pendiente, rodeados en su mayoría por propiedades particulares dedicadas al cultivo agrícola, con el consiguiente riesgo de incendio.

Además, la adecuación de la espesura, tanto en masas de origen natural como artificial, favorece la diversidad vegetal y la ocupación completa de los diferentes estratos edáficos, a la vez que dificulta un posible incendio de copas.

OBJETIVOS: El objetivo fundamental para la Administración Regional es conseguir un aumento de la diversidad de las especies vegetales en los rodales de repoblación, para multiplicar los nichos ecológicos de la fauna y aumentar la capacidad de acogida de las masas artificiales. Al mismo tiempo se conservarán y compatibilizarán los aprovechamientos de madera, ganaderos y cinegéticos y otros beneficios de las masas forestales.

jueves, 19 de abril de 2007

FACTORES QUE INFLUYEN EN EL INICIO Y PROPAGACIÓN DE UN INCENDIO FORESTAL


Los factores que influyen en el inicio y propagación de un incendio forestal pueden agruparse en tres tipos principales: topográficos, atmosféricos y bióticos. Estos tres tipos de factores forman la llamada “tríada del fuego”.

Factores de tipo topográfico

Son los más constantes de los tres, e influyen sobre los otros dos. Los factores topográficos más importantes son:

- Pendiente: en un fuego que asciende, cuanto mayor sea la pendiente más rápido se propagará el incendio, ya que las llamas se encontrarán más cerca del combustible y este se precalentará antes. En cuanto a su influencia en el tiempo atmosférico los cañones y chimeneas de fuerte pendiente son origen de vientos ascendentes intensos que aumentarán la velocidad de propagación del fuego.

- Altitud: tiene una gran influencia sobre la climatología, que a su vez repercute en el desarrollo vegetal. A más altitud, en general, menor será la temperatura ambiental y mayor la humedad. El descenso de la temperatura con la altitud hace que en paralelo también descienda la cantidad de combustible vegetal.

- Exposición: en las laderas de solana la temperatura es más alta y por tanto la humedad relativa, menor, siendo más favorables para el inicio y propagación del fuego.

- Relieve: tiene especial influencia en los regímenes de vientos y en el microclima.

Factores de tipo atmosférico

Como se ha visto están muy influidos por los factores topográficos. Los principales son:

- Humedad atmosférica: influye directamente en la humedad del combustible, que cuanto más húmedo esté más difícilmente arderá, ya que será necesario invertir más energía en evaporar el agua.

- Temperatura ambiente: a mayor temperatura más desecación habrá, siendo por tanto las condiciones más favorables para el inicio y desarrollo del incendio.

- Viento: favorece la propagación del fuego al aportar oxígeno, aproximar las llamas al combustible que aún no ha ardido, desplazar chispas y pavesas y desecar el combustible.

Factores de tipo biótico

Son los factores ligados al combustible forestal. Los principales son:

- Estado del combustible: vivo o muerto. El muerto tendrá menos humedad y arderá más fácilmente.

- Ubicación: subterráneos, superficiales o aéreos. La proporción de cada uno determinará el tipo de incendio.

- Disponibilidad: no todo el combustible está en condiciones de arder.

Otras características del combustible a tener en cuenta son la cantidad, tamaño, forma, compactación, continuidad horizontal y vertical, densidad, sustancias químicas presentes y humedad.

IMÁGENES DE LOS TIPOS DE INCENDIOS FORESTALES




TIPOS DE FUEGO

Los fuegos, en función del modo de propagación y de la posición en relación con la superficie del suelo se clasifican en:

1. Fuegos de superficie: Son los más comunes, se propagan por la superficie. En este tipo de fuegos interviene fundamentalmente la radiación. Pueden transformarse en fuegos de copas. Se diferencian:

- Fuegos que consumen litera y vegetación herbácea
- Fuegos que queman el sotobosque y los matorrales pequeños
- Fuegos que consumen restos de podas depositados en el suelo


2. Fuegos de copas: Avanzan de copa en copa, son típicos de bosques con gran conexión entre copas como los bosques de coníferas. Se propagan rápidamente liberando una gran cantidad de energía. Suelen derivar de fuegos de superficie. Pueden producir focos secundarios. Se diferencian dos tipos:

- Fuegos de copas independientes, no dependen de lo que ocurre en superficie.
- Fuegos de copas dependientes, dependen de lo que ocurre en superficie, es decir, del calor de convección generado en superficie.

A su vez, estos fuegos pueden ser:

- Pasivos, si no avanzan de copa en copa
- Activos, si avanzan de copa en copa. Esto ocurre cuando hay una fuerte conexión entre las copas.

Dentro de los fuegos de copas existen dos subtipos:

- Fuegos intensos que produzcan una destrucción total de las copas
- Fuegos intermitentes, en este caso el fuego discurre de una copa en otra sin quemarlas totalmente.

3. Fuegos de subsuelo: Discurren quemando la materia orgánica acumulada en el suelo mineral, avanzan por el interior del suelo. No producen llamas y emiten poco humo. Avanzan lentamente debido a la carencia de oxígeno. Pueden ser más destructivos que los anteriores ya que destruyen los sistemas subterráneos de la vegetación.

En función de la superficie afectada, se diferencian:

Conatos: fuegos que afectan a superficies pequeñas, menores de 1 hectárea.
Incendios forestales: la superficie afectada es mayor de una hectárea. Pueden ser medianos si la superficie es menor de 500 hectáreas o grandes si es mayor.

LAS CAUSAS DE LOS INCENDIOS FORESTALES

En España pocos son los incendios forestales que se producen de forma natural, aunque este pequeño porcentaje (5 %) nos indica que los incendios no solo son culpa del ser humano.

Entre las causas naturales destacan los rayos de tormentas, sobre todo en la franja mediterránea, los fuegos debidos a erupciones volcánicas, históricamente frecuentes en la Islas Canarias, y aquellos causados por una combustión espontánea debida a altas temperaturas. Las causas, sin embargo, suelen ser de origen antrópico.

En nuestro país cada vez hay menos incendios con causas desconocidas, puesto que se destinan grandes esfuerzos a conocer el porqué de cada incendio forestal y existe para ello, desde 1968, la Base de Datos sobre Incendios Forestales (BDIF). Dichas indagaciones dejan claro que el 95 % de estos se deben a una acción humana intencionada o negligente.

Los seres humanos, al hacer un uso directo del fuego para crear nuevas zonas agrícolas o de pastos, al quemar rastrojos o al utilizarlo con fines recreativos (hogueras, barbacoas, etc.), pueden ser los causantes de graves incendios forestales cuando realizan dichas actividades de manera incontrolada.
De manera indirecta, el abandono de las actividades tradicionales a causa del éxodo rural hace que se acumule gran cantidad de combustible potencial en las primeras etapas de recuperación del bosque. También aumenta el riesgo de incendio en los bosques que antiguamente se aprovechaban con fines económicos y hoy en día están abandonados.

Mención especial merecen los incendios intencionados, cada vez más frecuentes, y cuyas motivaciones van desde venganzas hasta el mero gamberrismo.

En la página del Ministerio de Medio Ambiente podéis encontrar algunos datos de interés:

http://www.mma.es/portal/secciones/biodiversidad/defensa_incendios/

EL HOMBRE DESCUBRE EL FUEGO

Los inicios nunca son fáciles, pero gracias al descubrimiento y manejo del fuego, los seres humanos estamos hoy donde estamos.

¿QUÉ ES UN INCENDIO FORESTAL?

Entendemos por incendio forestal todo aquel que se extiende sin control sobre terreno forestal que no estaba destinado a la quema.
En la anterior definición aparecen dos términos que nos llaman la atención pero que son imprescindibles para poder comprender lo que un incendio de estas características significa:

-Terreno forestal: se trata de una superficie cubierta por herbáceas, arbustos o árboles que pueden aparecer de forma espontánea o como resultado de una plantación pero que NUNCA está sujeta a acciones agrícolas. Así por ejemplo una chopera plantada no sería considerada terreno forestal por estar sometida a prácticas agrícolas como el riego periódico.

-Sin control: caracteriza a todos aquellos incendios que no sean quemas de rastrojos, pastos, matorrales o residuos forestales.


FUEGOS NATURALES

Aunque la mayoría de los fuegos de los que nos hacemos eco y vemos por la televisión son de origen humano, también existen fuegos de origen natural.
Estos fuegos forman parte de la dinámica natural de muchos ecosistemas y responden a una exteriorización de la energía. Sin que la mano del hombre esté detrás se pueden originar incendios debido a los rayos de alguna tormenta, erupciones volcánicas, o simplemente por las elevadas temperaturas que se dan en épocas concretas del año.

EL HOMBRE Y EL FUEGO

EL HOMBRE PREHISTÓRICO Y EL FUEGO

Inicialmente, el hombre al igual que el resto de los animales temía al fuego; pero en algún momento de la Prehistoria aprendió a utilizarlo en su beneficio. En un principio dependía de los incendios naturales, lo que implicaba el cuidadoso mantenimiento y transporte de la llama obtenida a partir de dichos incendios. Esta situación se prolongó en el tiempo hasta que el hombre aprendió a hacer fuego por sí mismo, unos 40.000 o 50.000 años A.C. El hombre primitivo utilizaba el fuego para:
- Calentarse y cocinar
- Comunicarse con los miembros de su tribu
- Atraer a animales salvajes a zonas recientemente quemadas, en las que rebrotaba el pasto
-Crear pastos para su ganado

EL FUEGO COMO OBJETO DE CULTO

El fuego ha estado presente siempre en todas las mitologías y creencias religiosas, lo que se explica por el carácter “sobrenatural” que siempre se le ha atribuido:
- Fue considerado uno de los cuatro elementos esenciales, junto con el Agua, el Aire y la Tierra.
- En la mitología griega aparece como elemento fundamental en los mitos de Prometeo y de la caja de Pandora.
-Las vestales romanas consagraban su vida a la custodia del fuego sagrado del templo circular (Tolos).
- Fue visto como un elemento purificador o asociado a los demonios. Ejemplo de ello son “moloc”, divinidad del fuego fenicia y cartaginesa en las religiones del medio-oriente, y el infierno cristiano.
- Ocupaba un papel fundamental en las mitologías precolombinas: se relacionaban con el fuego deidades de los indios Caiapos del Amazonas, como Bedgororoti, o el dios Xiuhtecuhtli en la mitología azteca.

OTROS USOS DEL FUEGO

El fuego también fue usado como instrumento de guerra, pero sobre todo se utilizaba con una finalidad agrícola y pastoral en la dinámica de desbroce, quema y siembra, tan común en la Europa mediterránea, pero que también se extiende por otras zonas del mundo (zonas tropicales, praderas americanas…).

EL FUEGO EN LA ACTUALIDAD

El hombre ha utilizado desde tiempos inmemoriales el fuego como una herramienta para modificar su ambiente, lo cual ha originado una considerable degradación del medio cuando el uso del fuego ha sido excesivo o ha originado graves incendios. Ello dio lugar a que la mayoría de países adoptaran una política de supresión del fuego, a pesar de la cual los incendios experimentaron un gran incremento. En las últimas décadas se está empezando a utilizar el fuego como una herramienta de gestión, ya que cuando su uso es adecuado y racional permite la conservación de pastizales y sistemas con una comunidad clímax pirófita, además de la reducción del combustible acumulado en las masas forestales, lo cual redunda en una disminución del riesgo de incendio y de la intensidad del mismo en caso de que llegue a producirse.